Recorriendo la feria de Tristán Narvaja, en búsqueda de fotos, que juegan como disparadores para mi trabajo, cayó en mis manos, una no particularmente atractiva bolsa de supermercado, llena de fotos. Era el final del día y no había tiempo para elegir. Dudé que hacer.
Por 150 pesos, se la lleva a casa, dijo el vendedor. Y así hice.
Ya en casa, para mi sorpresa, las fotos desplegaron frente a mi toda una vida. Personajes de la cultura uruguaya aparecían visitando, recibiendo premios o en momentos importantes de sus vidas privada. Vaz Ferreira en su escritorio, los hijos de Zorrilla de San Martín, en un cementerio inundado en Buenos Aires, rescatando los restos de su madre, allí enterrada.
¿Cómo era posible esto?
¿Qué sucedió para que las trazas-fotos de esas vidas terminara en la feria? ¿Qué se dislocó para que perdieran sentido y fueran abandonadas?
Desde mi retorno al Uruguay, luego de un forzado exilio de treinta años, he buscado entender y de alguna manera reconstruir, el Uruguay que me he encontrado. Zanjar la brecha entre el país de mis años jóvenes y el Uruguay de hoy. Soy consciente que la brecha es infranqueable, pero es esta brecha la que me permite pensar y preguntar críticamente sobre el Uruguay.
Una entre todas las fotos saltó a mi vista. Atrás dice simplemente :”placa de vidrio- flía. Batlle” y pasó a ser la base de esta muestra. Metáfora de un período que va del año 1928 al año 1980, de una manera abierta y totalmente subjetiva. Un recorrido en donde los recuerdos de la juventud se contraponen con la realidad que encuentro hoy y en donde los datos históricos no tienen más peso que esos recuerdos. Y es allí en dónde queda en evidencia la brecha y la posibilidad, para que, el que me acompañe en el recorrido, formule sus propias preguntas y cuestione este Uruguay de hoy.
Alberto Lastreto
Fuente: lapasionariauniversocreativo.blogspot.com
Exposición Alberto Lastreto / «1928 – 1980» en La Pasionaria – Noviembre 2010 © Federico Meneses
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