Miguel Porley nació 1949 en San José de Mayo. Desde siempre tuvo vocación por el dibujo y la pintura. Es por ello que asistió al taller de Hugo Nantes, quien lo impulsó y orientó en su formación, proponiéndole integrarse al taller del maestro Dumas Oroño. En el taller de Dumas, a partir de 1985, comienza un fecundo aprendizaje, con los fundamentos de la escuela de Torres García, que Dumas había integrado.
Desde el año 2011 hasta hoy recibe una importante influencia del artista Gustavo Alamón quien lo ha apoyado e influido en forma importante en la búsqueda de un camino propio.
Hoy día, Porley está dedicado exclusivamente a su actividad plástica en su atelier en Montevideo. Ha expuesto individual y colectivamente, y nos responde sobre diversas cuestiones relacionadas a su arte, pasando a formar parte de Plásticos de esos que ves por ahí.
“Se pueden copiar todos los detalles de la forma, pero la esencia interna es un tema que me atrapa y origina la sensibilidad artística”
-¿Cuándo empezaste en el arte?
-Desde la niñez, a través de las revistas, los héroes y sus mundos me cautivaban. Una tendencia emocional al dibujo, a toda representación gráfica y sus misterios. Luego, en la adolescencia iba al taller de Hugo Nantes (en San José) a quien observaba y escuchaba mientras trabajaba.
Cuando me vine a Montevideo, Nantes me aconsejó integrarme al taller de Dumas Oroño. Con Dumas comencé en 1985 y pasé varios años en su taller, muy valiosos en mi formación.
-¿Qué intentan exteriorizar tus obras?
-Fundamentalmente lo emocional. Esa fuerza, energía y misterio del motivo, es lo que me impulsa a hacer. Se pueden copiar todos los detalles de la forma, pero la esencia interna es un tema que me atrapa y origina la sensibilidad artística.
Siento que hay que decir con fuerza lo que uno tiene que decir. En el lenguaje plástico, actualmente, experimento con diversos medios, para aproximarme a lograr lo que siento y pienso.
-¿Cuánto hay de pensado y de espontáneo en tus obras?
-Son dos líneas de trabajo complementarias. Parto de la idea y ésta se va transformando a medida que avanzo. No soy del estilo “Lo tengo claro y luego lo pongo en la tela”. En la exploración de nuevas cosas soy más espontáneo, aún.
-¿Con qué herramientas, materiales y temáticas trabajas más?¿Por qué eliges los materiales que utilizas para trabajar?
-Trabajo, principalmente, con óleo sobre tela. Pero también trabajo con acuarelas, tinta china y pastel. La elección de los materiales siempre se basa en la mejor adecuación al motivo. El lenguaje debe ser el adecuado en cada caso.
En cuanto a la temática, he incursionado mucho en los retratos y paisajes humanizados. Ahora estoy haciendo algunas abstracciones orgánicas. Dedico muchas horas a esta línea de trabajo.
-¿Tienes una medida estándar para trabajar? ¿Sobre que superficie te gusta trabajar?
-Trabajo en diferentes medidas. Obras de tamaño medio a grandes.
Uso telas, cartones, cartulinas….lo usual.
-¿Cuánto hay de independencia en cada obra y cuánto de relación con la anterior y la siguiente?
-Hasta el momento, he tenido pocas obras seriales. Es claro que el grafismo, el lenguaje plástico y las ideas que me identifican, se mantienen.
Pero hay que mostrar una inquietud por un camino nuevo y esa es mi búsqueda actual. Trabajo buscando un camino. En el trabajo se producen hallazgos, los cuales capitalizo y sigo buscando.
-¿Cómo crees que influye o puede incidir el tiempo para con tus creaciones?
-Paso muchas horas en mi taller, porque “estando” y “trabajando” surgen cosas, hay encuentros y desencuentros, pero el trabajar tiene un valor residual que se incorpora a las creaciones. Por este motivo no produzco rápido. El tiempo nos va transformando y nos obliga a dar nuevos pasos.
-¿Qué te interesa que generen en el espectador?
-Bueno, me gustaría que alguien sienta un “toque” en su interior, que sienta un hilo emocional con la obra y que perciba algún misterio del logro.
-¿Se puede vivir del arte en Uruguay?
-El comercio del arte, no es mi fuerte y me parece que muy pocos pueden vivir del arte. Algunos canalizan ventas y otros hacen docencia.
-¿Crees que en el arte contemporáneo todo es válido?
-El arte contemporáneo incorporó nuevos paradigmas. Todas las ideas del arte pasaron a cuestionarse, los límites de los lenguajes se han desdibujado, pero no se puede decretar la muerte de lo existente ni ignorar la nueva realidad.
Hay cosas que generan una inevitable perplejidad y otras que motivan reflexiones. Yo pienso que al final, perdurará lo que vale y lo bueno siempre vale. Lo demás pasará como una moda efímera. El verdadero arte lo califica el tiempo.
Lo que sí me interesa expresar es que, los sacudones a lo establecido, las transgresiones a lo existente hacen bien porque obligan a cuestionarse, a los replanteos, a la reflexión. Las crisis generan nuevos caminos.
-¿Cuál es tu opinión de la escena local en cuanto a las Artes Visuales?
-Aumentó la diversidad de propuestas. Lo bueno es que hay propuestas. Aquí está el valor. Hay riqueza creativa, gente inquieta por un relato artístico y eso es muy bueno. Lo que falta impulsar son los canales de difusión en cantidad y variedad.
-¿Qué harías para mejorar la relación artista – galería de arte – público?
-No tengo una receta, pero la oferta de arte debiera tener canales que apoyen al artista. Pienso en eventos, difusión, publicaciones para acercar el arte al gran público.
El artista trabaja en su taller y necesita canales de apoyo, promoción, difusión y oferta en mercados diversos. Debiera haber más foros de discusión, con los artistas.
Conozco emprendimientos valiosos, como el que ustedes hacen y otros que también perduran. Hay gente generosa, en este sentido.
-¿Cuáles son tus referentes artísticos?
-He tenido en mi vida, múltiples referentes en los distintos “ismos” de la historia del arte. Uno tiende a hacer cosas muy parecidas a lo que hicieron otros muy bien. Casi todos recorremos este camino.
Luego viene una etapa más reflexiva, donde “se explora algo más”, donde se siente que se ha agotado algo y se necesita descubrir nuevas formas y contenidos.Aquí los referentes cambian, pues son aquellos que generan inquietudes y ayudan a pensar. Desde este punto son referentes Manuel Espínola Gómez y Gustavo Alamón.
-¿De qué manera das a conocer tu obra al mundo?
-Bueno, difundo mi obra a través de un sitio web www.miguelporley.com.uy, y redes sociales, donde genero vínculos con la gente. En mi taller ven lo que hago.
He expuesto y lo sigo haciendo en muestras colectivas, cada vez que puedo.
Nunca hice una muestra individual. Este año comencé a plantearme esto como posibilidad.
-¿Crees que el público uruguayo sabe apreciar y consumir arte?
-Hay un segmento del público uruguayo que sabe apreciar arte y consume (en el sentido de comprar). Pero el gran público no conoce la realidad del arte. Apreciar el arte está supeditado a la difusión que el artista tenga.
-¿Qué opiniones te merece el arte y las redes sociales?
-Me parece que las redes sociales son una buena herramienta, pero bien usadas. Pueden ser un buen canal de difusión, o espacio de intercambios, foros, etc.….
No obstante la obra de arte hay que verla en la realidad, no en las redes.
-¿En qué proyectos trabajas actualmente?
-En dos proyectos. Por un lado trabajando en obras y experimentando variaciones al lenguaje plástico y en propuestas nuevas.
Por otra parte estoy planteándome hacer una muestra individual. Veremos.
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