El 11 de mayo Orientación Poesía se presentó una vez más en un liceo de la capital. En esta oportunidad se realizó en el colegio Erik Erikson del Prado y tuvo como escritor invitado a Camilo Baráibar.
Orientación Poesía es un proyecto pensado para la difusión de la poesía joven en liceos públicos y privados del país. El mismo está integrado por José Luis Gadea (Hoski), Miguel Avero y Santiago Pereira. Nace de una inquietud en común, respecto a la difusión que actualmente tiene la poesía en Uruguay y la relación de ésta con su público.
Este proyecto contribuye al proceso educativo, beneficiando no solo a los estudiantes, sino también a los docentes que participan en dichas instancias. Busca estimular a los estudiantes en esa acción de crear y transmitir a través de la escritura. Como complemento, también aporta información práctica a los estudiantes en lo que refiere a dudas sobre como editar un libro, como se difunde la escritura, etc. La forma de organizar estos talleres es coordinando con aquellos docentes que estén dispuestos a participar fijando un día, y uno o más grupos los reciben en el horario de clase. Los escritores de Orientación Poesía leen textos y relatan su experiencia como escritores. Luego los alumnos leen los suyos y se intercambian preguntas y dudas. Con esto buscan mostrarles que cada autor tiene su lenguaje, sus imágenes, intereses y motivaciones; en base a esto es que luego cada uno sentirá la necesidad de escribir de tal o cual forma. En algunas ocasiones hay escritores invitados externos al proyecto a modo de enriquecer esta actividad y de tender puentes entre los mismos. El proyecto contó con el apoyo de APLU, lo cual facilitó su acercamiento a los docentes. A la fecha llevan realizados diez talleres.
Para los integrantes de Orientación Poesía, la literatura que se brinda a los jóvenes en las instituciones educativas es incompleta, hay poco contacto con la literatura contemporánea y lo que va de la mano con ella: sus códigos, modismos, intereses, realidades y contextos. Esto muchas veces desmotiva a los jóvenes a adentrarse en el mundo de la escritura y sobre todo de la poesía.
Opinan que si bien las tertulias literarias y los ciclos destinados a lecturas son enriquecedores, los mismos no logran saciar sus expectativas. Por un lado estos ámbitos permiten a los artistas compartir sus creaciones, interactuando y retransmitiendo experiencias y conocimientos. Pero por otro lado, estos ciclos literarios son realizados por un grupo reducido de escritores, y dirigido a un público también reducido.
Referente a la difusión y edición de libros, opinan que en Uruguay la poesía se consume por una minoría, el concepto de poeta y poesía se ha tornado en desuso por la sociedad. Por este motivo cada vez es más difícil que las editoriales inviertan dinero en editar libros de esta índole, pues no es redituable, y más aun cuando se trata de escritores jóvenes. Coinciden en que los concursos son un canal importante de difusión y motivación, que ayudan además a generar confianza en los escritores jóvenes. Pero como contraparte, una de sus principales fallas se encuentra en la escasa o mal lograda divulgación de la información. Esta información muchas veces no llega a estos jóvenes ya que no se encuentra inmersa en los ámbitos en los que ellos se mueven. Recomiendan a estos jóvenes, usar las plataformas de internet, blogs, notas de facebook, donde exponer sus materiales, compartirlos e interactuar con los posibles lectores. Para ellos, uno mismo debe ir forjando el camino, buscando puertas que se abran.
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